Emmascarats (1976) comprende un conjunto de seis fotografías en blanco y negro en las que aparece el busto de una mujer con el rostro cubierto con distintos elementos. También se presenta la secuencia del rostro descubierto y cómo va cubriéndose progresivamente hasta quedar completamente oculto. La máscara, el acto de enmascarar, encubre, tapa, oculta, borra, pero también desdibuja. De un modo similar a la acción de disolución del rostro, el conjunto se configura como una serie de retratos sin entidad, sin subjetividad: son antirretratos. El individuo, la mujer, desaparece. Si en otras ocasiones ha sido «cosificada», aquí los atributos la ocultan y asumen el protagonismo.